18 abril 2008

El consejo q más me ha gustado

La otra vez leí q el tiempo del universo, el absoluto, es un metrónomo constantemente haciendo tic-tac en un rincón y la humanidad es un cuarteto de cuerdas que no hace mas q tocar. Así, todo se llena se sonido y movimiento. El metrónomo no tarda en volverse inaudible y los músicos hasta lo olvidan: cada uno tiene una concepción de su propio tiempo, cada uno interpreta y construye en ese momento y lugar un tiempo único, uno q paradojalmente tiene todo y nada q ver con el instrumento en el rincón. Aunq pareciera a simple vista que se vuelve un caos, la realidad es muy distinta, ya q es precisamente esta enorme diferencia en los tiempos de cada instrumento lo q hace q el cuarteto dé un verdadero concierto. Cada uno aporta, cada uno es imprescindible.


No recuerdo exactamente cuando fue, pero debo haber tenido unos nueve años. Estaba triste xq mi hmna Fernanda no había entrado a kinder en mi colegio. Tenía ganas de llorar y mi bisabuela, lúcida hasta su último día, me llamó a una esquina y me ordenó (ella ordenaba jajaja) q quitara la cara de pena. Me consoló diciéndome que mi hmna y yo éramos distintas, que íbamos a distintos ritmos. “Hace las cosas a tu propio tiempo Valerita, que tu tiempo es el único q debes seguir” me dijo. Con mi inmadurez lo tomé como que mi hmna era más lenta q yo jajaja, pero ahora estoy segura de q lo q quiso decirme fue q hiciera las cosas a mi modo, como yo lo viera o sintiera mejor, q no intentara seguir a nadie.

Yo sabré cuando entrar en un concierto o cuando iniciar mi tema, cuando tocar un Do o cuando hacer una pausa. Yo sabré a quienes unirme o a quienes pedirles q se me unan, sabré los temas q quiero tocar y los q prefiero omitir. Porque todos tocamos, todos nos levantamos cada día con el mundo dispuesto a oírnos, a oír lo q somos, lo q sentimos, lo q queremos... Espero así, al final de mi vida, escuchar con una sonrisa el concierto q fue mi vida, la vida de la q se consideró alguna vez el violín mas pequeño del mundo.

Ps: la imagen pertenece a Damian Siqueiros (http://dsiqueiros.deviantart.com/)